como un susurro constante en mi oído
bésame, tócame, siénteme..., decías,
y tuvimos nuestro primer beso
¡ mirándonos !
nos dimos nuestro primer beso de amor.
Juntar nuestra piel
hizo que nuestros labios ardieran en nuestras mejillas
que se rozaran con ternura
que se buscaran con deseo.
Nuestras manos dibujaban nuestra figura
recorriendo palmo a palmo con dulzura, con pasión
hasta el último rincon de nuestro pudor,
sigue, no pares ! decías...,
y de nuestros labios brotaba PASIÓN
de nuestros ojos FUEGO
y de nuestra piel PLACER, EMOCIÓN.
Anoche escuchaba tu voz como un susurro
y hoy al despertar seguías hablándome al oído..
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Aurora Mateo ..
